Ecosistemas artificiales permitirían optimizar la producción de biocombustibles a partir de algas

Las algas podrían convertirse en una fuente sustentable importante de biocombustibles, dado que la producción no compite con los cultivos por la tierra, ni como fuente de alimento. Las algas podrían convertirse en una fuente sustentable importante de biocombustibles, dado que la producción no compite con los cultivos por la tierra, ni como fuente de alimento.

Sin embargo, para que eso sea posible, su producción a gran escala debe ser eficiente en términos de costos y emisión de carbono. Para lograrlo, es necesario cambiar de sistemas “cerrados“ de crecimiento a sistemas “abiertos”, como por ejemplo piletones o tanques.

Actualmente, la producción de algas (en general relacionada a la industria de los productos cosmetológicos) se lleva a cabo mayoritariamente en sistemas cerrados, que requieren de mucha energía para mantener a la población de algas aislada del ambiente que la rodea.

Los sistemas abiertos, si bien son menos costosos, son más vulnerables al entorno, incluyendo contaminaciones y predadores. Un grupo de científicos de la Universidad de Cambridge explica, en un artículo publicado recientemente en la Revista Journal of Biotechnology, cómo comprendiendo la ecología de las poblaciones de algas, se podrían desarrollar sistemas de cultivo más confiables. Utilizando conceptos teóricos, los autores muestran de qué manera conocimientos relacionados a la dinámica de las comunidades de algas a nivel de especies, podrían utilizarse para aumentar la productividad.

Según los investigadores, aquellos ecosistemas con mayor número de especies son más estables y más tolerantes a los cambios que los sistemas de cultivo basados en una sola especie. Además, proponen el término “ecología sintética” para describir al diseño y creación de una comunidad “ideal” de algas para la producción a escala industrial. En este caso en particular, la comunidad sintética diseñada para estabilizar el crecimiento de algas productoras de aceite, podría estar compuesta por distintos organismos. Entre ellos, podrían incluirse bacterias productoras de vitaminas, como la vitamina B12, para evitar suplementar al cultivo con un insumo costoso,  y para que compitan con otras bacterias contaminantes. Otras especies de algas podrían incluirse para aumentar la biomasa del cultivo, y ciertas especies de zooplancton podrían controlar la aparición de predadores.


“Synthetic ecology – A way forward for sustainable algal biofuel production?”
Elena Kazamiaa, , David C. Aldridgeb, , Alison G. Smith. Journal of Biotechnology, 2012