Cada vez son más las evidencias que muestran el impacto positivo de los cultivos transgénicos
Un artículo publicado en la revista internacional Nature Biotechnology concluye que los cultivos transgénicos tienen un impacto positivo para los agricultores, sobre todo en los países en desarrollo.
En un artículo publicado en el ultimo número de la revista Nature Biotechnology, Janet E. Carpenter muestra, a partir de los estudios realizados en los diferentes países, el por qué del éxito de los cultivos transgénicos. Carpenter, quien ha trabajado en temas relacionados con la agricultura durante más de diez años, analiza 49 trabajos publicados en revistas con referato y basados en información obtenida de los productores, donde se comparan rendimientos y otros indicadores de desempeño económico entre usuarios y no usuarios de la tecnología.
El análisis realizado por Carpenter sostiene que los cultivos genéticamente modificados le brindan mayores rendimientos al productor agropecuario. De todos los estudios analizados en este sentido, el 74% muestra que los rendimientos han sido mayores entre los que adoptaron la tecnología en comparación con los que no lo hicieron, con un impacto mayor en los productores de países en desarrollo.
"Los resultados indican que los productores de los países en desarrollo están logrando mayores diferencias en el rendimiento que los de países desarrollados. Los aumentos promedio en los países en desarrollo fueron de 16% para el maíz resistente a insectos a un 30% para el algodón resistente a insectos", señaló Carpenter.
El artículo también presenta evidencias sobre los beneficios económicos totales de los cultivos transgénicos. "Considerando todos los indicadores de desempeño económico, los resultados son altamente positivos," escribe Carpenter. "De los 98 casos de la literatura en los que se comparan el desempeño económico de los cultivos GM con sus pares convencionales, 71 muestran un impacto económico positivo, 11 neutro y 16 negativo."
Según el Servicio Internacional para la Adquisición de Aplicaciones Agrobiotecnológicas (ISAAA), la adopción global de los cultivos genéticamente modificados aumentó en un 7% en 2009. En 25 países, 14 millones de agricultores cultivaron 134 millones de hectáreas de transgénicos, el 90% de estos agricultores fueron de países en desarrollo.
"La evidencia que se presenta en Nature Biotechnology confirma una vez más los beneficios económicos y en el rendimiento que venimos escuchando de los productores de todo el mundo desde hace más de una década", enfatizó Denise Dewar, directora ejecutiva del área de biotecnología agrícola de CropLife International. "Ellos se enfrentan al cambio climático y a presiones de plagas que están dificultando alcanzar la seguridad alimentaria necesaria para una población en crecimiento. El aumento continuo de la superficie cultivada con transgénicos es un testimonio de una verdad muy simple: cuando tienen la opción, los agricultores eligen los cultivos genéticamente modificados, porque perciben los beneficios que representan".
Entre las conclusiones del artículo publicado en Nature Biotechnology también se destacan:
• Los cultivos GM constituyen una manera costo-eficiente de aumentar los rendimientos. En la mayoría de los casos analizados, el aumento del costo de las semillas (incluyendo las regalías por la tecnología) se vio compensado por la reducción en los costos de los insecticidas.
• Los productores ven en los cultivos transgénicos la posibilidad de ahorrar tiempo, lo que les permite a su vez ahorrar dinero. Un estudio basado en la experiencia de productores de maíz de Estados Unidos reveló que la reducción en el tiempo de laboreo, la seguridad ambiental y para la salud humana, la reducción del riesgo en los rendimientos, el ahorro en la maquinaria y la mejor estabilidad del maíz resistente a insectos, tomados en conjunto, representaron un ahorro de U$ 10,32 por hectárea.
• Los cultivos GM ayudan a conservar el recurso suelo facilitando la implementación de prácticas conservacionistas como la Siembra Directa.