Se inicia primera fase del Centro Nacional de Biotecnología de Perú
Se inició la primera fase de implementación del Centro Nacional de Biotecnología Agropecuaria y Forestal, la cual tendrá un costo aproximado de 6 millones de nuevos soles (dos millones de dólares).
En días pasados el Ministerio de Agricultura de Perú (Minag) inició la primera fase implementación del Centro Nacional de Biotecnología Agropecuaria y Forestal. Este centro permitirá mejorar la competitividad agraria de Perú en la región.
Para la primera fase del proyecto, con vigencia hasta el 30 de marzo de 2010, el Instituto Nacional de Innovación Agraria –INIA- planea desarrollar capacidades para ejecutar encargos nacionales en bioseguridad. Esta fase tendrá un costo de 5 millones 991 mil nuevos soles (dos millones de dólares).
Según informó el ministro de Agricultura, Carlos Leyton, este proyecto –administrado por el INIA- requirió la asistencia técnica del Instituto Interamericano de Cooperación Agrícola –IICA-. Además, recordó que este proyecto se inició el 26 de mayo del año pasado (2008) con la suscripción de la carta de entendimiento entre las dos instituciones (INIA e IICA).
A través de este documento el IICA se comprometió a brindar una cooperación técnica y de administración de recursos para la implementación y ejecución del proyecto denominado Desarrollo de Capacidades para la Implementación y Utilización de la Biotecnología Moderna en el Sector Agropecuario (CNBAF).
Dentro de las medidas necesarias para el buen desarrollo del proyecto se encuentran la contratación de consultorías especializadas internacionales y nacionales para la evaluación de las necesidades estratégicas de Perú en biotecnología agropecuaria y forestal, y también se contempla fortalecer la capacitación del personal del INIA en el exterior con el fin de maximizar la efectividad de los resultados que se buscan.
Además, el ministro informó que se adquirieron varios equipos tecnológicos. “Estos equipos permitirán al INIA, a través de la Subdirección de Recursos Genéticos, cumplir con los encargos nacionales en bioseguridad y desarrollar la biotecnología necesaria para la puesta en valor y uso sostenible de nuestros recursos genéticos”.
