La naturaleza extrema ayuda a los científicos a diseñar nano materiales
Los científicos están utilizando diseños que existen en la naturaleza de los ambientes extremos para superar los desafíos de producir materiales en una escala nanométrica.
Los científicos están utilizando diseños que existen en la naturaleza de los ambientes extremos para superar los desafíos de producir materiales en una escala nanométrica.
Un equipo del John Innes Centre (Reino Unido), junto con investigadores del Scripps Research Institute (California, EEUU) y el Instituto Pasteur (Francia), han identificado a un virus con características atractivas para ser usado como “nanobloque” en la construcción de nanopartículas.
Las partículas nanovirales (VNPs) tienen un tamaño ideal, pueden ser producidas en grandes cantidades, y son muy estables. Se pueden auto-ensamblar con mucha precisión, y a la vez pueden ser modificables químicamente o por ingeniería genética. Algunas aplicaciones de las VNPs requieren que puedan resistir condiciones extremas. Su uso en sistemas eléctricos las podría exponer a altas temperaturas; en cambio, si el objetivo es utilizarlas en medicina, las VNPs deberían tolerar condiciones de exposición a ambientes muy ácidos. Aquellas VNPs capaces de superar tales desafíos, son deseables para el desarrollo de nanomateriales. El equipo científico identificó partículas virales en resortes sulfurosos calientes en Islandia. Uno de ellos, SIRV2, fue estudiado para ver su potencialidad como nanobloque viral. SIRV2 es un virus que infecta al microorganismo Sulfolobus islandicus, que puede crecer a una temperatura de 80°C, en medios ácidos (pH=3). El virus pudo tolerar éstas y otras condiciones extremas testeadas en el laboratorio. Por otro lado, dependiendo de las reacciones químicas realizadas, los investigadores pudieron modificar distintos componentes del virus. Todas estas características convierten a SIRV2 en un buen candidato para el desarrollo de nanomateriales.Estos resultados serán publicados durante el mes de noviembre en la revista Journal Advanced Functional Materials.
Un equipo del John Innes Centre (Reino Unido), junto con investigadores del Scripps Research Institute (California, EEUU) y el Instituto Pasteur (Francia), han identificado a un virus con características atractivas para ser usado como “nanobloque” en la construcción de nanopartículas.
Las partículas nanovirales (VNPs) tienen un tamaño ideal, pueden ser producidas en grandes cantidades, y son muy estables. Se pueden auto-ensamblar con mucha precisión, y a la vez pueden ser modificables químicamente o por ingeniería genética. Algunas aplicaciones de las VNPs requieren que puedan resistir condiciones extremas. Su uso en sistemas eléctricos las podría exponer a altas temperaturas; en cambio, si el objetivo es utilizarlas en medicina, las VNPs deberían tolerar condiciones de exposición a ambientes muy ácidos. Aquellas VNPs capaces de superar tales desafíos, son deseables para el desarrollo de nanomateriales. El equipo científico identificó partículas virales en resortes sulfurosos calientes en Islandia. Uno de ellos, SIRV2, fue estudiado para ver su potencialidad como nanobloque viral. SIRV2 es un virus que infecta al microorganismo Sulfolobus islandicus, que puede crecer a una temperatura de 80°C, en medios ácidos (pH=3). El virus pudo tolerar éstas y otras condiciones extremas testeadas en el laboratorio. Por otro lado, dependiendo de las reacciones químicas realizadas, los investigadores pudieron modificar distintos componentes del virus. Todas estas características convierten a SIRV2 en un buen candidato para el desarrollo de nanomateriales.Estos resultados serán publicados durante el mes de noviembre en la revista Journal Advanced Functional Materials.