Mandioca biofortificada podría brindar los requerimientos nutricionales mínimos
Los científicos están estudiando cómo fortificar la mandioca (o yuca, cassava) para que tenga suficientes vitaminas, minerales y proteínas, de modo de cubrir los requerimientos nutricionales mínimos de las poblaciones que usan a este tubérculo como base de su alimentación.
Los científicos están estudiando cómo fortificar la mandioca (o yuca, cassava) para que tenga suficientes vitaminas, minerales y proteínas, de modo de cubrir los requerimientos nutricionales mínimos de las poblaciones que usan a este tubérculo como base de su alimentación. Ya han modificado genéticamente a las plantas de mandioca para que resistan a una enfermedad viral devastadora, y ahora están usando la tecnología para disminuir los niveles de glucósidos cianogénicos, una sustancia que puede ser muy tóxica si no se procesa correctamente la mandioca antes de consumirla. La reducción también disminuye el tiempo de procesamiento requerido para que la mandioca pueda ser consumida, que generalmente es de tres a seis días. Este grupo internacional de científicos espera que estos mejoramientos puedan ser ensayados al menos en dos países africanos en 2010. Además de la resistencia a virus y la reducción en el contenido de glucósidos cianogénicos, los científicos están usando la ingeniería genética también para generar mandioca con más hierro, zinc, vitamina E y beta caroteno. El gran desafío es lograr que además el tubérculo tenga un mejor contenido de proteínas, y aparentemente esto podría lograrse acelerando la conversión de los compuestos de cianuro en aminoácidos, y de paso disminuir la toxicidad de estos compuestos. El proyecto BioCassava Plus fue iniciado con U$ 7,5 millones de la Fundación Gates, y recientemente ha recibido un apoyo adicional de U$ 4,6 millones de la misma fundación para acelerar la aplicación de estos conocimientos en África, involucrando a científicos y agricultores de ese continente.