Científicos desarrollan plátanos transgénicos con mayor vida útil y maduración retardada
Científicos israelíes de la Organización de Investigación Agrararia han desarrollado plantas de plátano modificadas genéticamente que presentan mayor vida útil y una maduración retardada, conseguido con la reducción de la expresión de dos factores de transcripción.
Científicos israelíes de la Organización de Investigación Agrararia han desarrollado plantas de plátano modificadas genéticamente que presentan mayor vida útil y una maduración retardada, conseguido con la reducción de la expresión de dos factores de transcripción.
Los investigadores se encuentran trabajando actualmente en la comercialización para que esta mejora genética pueda ayudar a agricultores y productores. Los resultados de este estudio fueron publicados en la revista Plant Physiology el pasado mes de marzo.
Basados en estudios previos sobre la maduración de los genes del tomate, los científicos caracterizaron genes similares del plátano, conocidos como los genes MADS box: MaMADS1 y MaMADS2. Cuando fue reprimida la expresión de dichos genes, las plantas de plátano presentaron maduración retardada y una vida útil mayor. La característica del retraso de la maduración está vinculada a la producción de la hormona de la maduración: el etileno. Las líneas con mayor represión de genes no produjeron etileno y la maduración fue más tardía.
La calidad y el sabor de los plátanos transgénicos siguió siendo el mismo que en los no modificados genéticamente. Los expertos reconocen que las soluciones genéticas a las pérdidas en postcosecha permitirían reducir el consumo de energía y aumentar la seguridad alimentaria, en especial en un cultivo como el del plátano, componente alimentario presente en todo el mundo.
Científicos israelíes de la Organización de Investigación Agrararia han desarrollado plantas de plátano modificadas genéticamente que presentan mayor vida útil y una maduración retardada, conseguido con la reducción de la expresión de dos factores de transcripción.
Los investigadores se encuentran trabajando actualmente en la comercialización para que esta mejora genética pueda ayudar a agricultores y productores. Los resultados de este estudio fueron publicados en la revista Plant Physiology el pasado mes de marzo.
Basados en estudios previos sobre la maduración de los genes del tomate, los científicos caracterizaron genes similares del plátano, conocidos como los genes MADS box: MaMADS1 y MaMADS2. Cuando fue reprimida la expresión de dichos genes, las plantas de plátano presentaron maduración retardada y una vida útil mayor. La característica del retraso de la maduración está vinculada a la producción de la hormona de la maduración: el etileno. Las líneas con mayor represión de genes no produjeron etileno y la maduración fue más tardía.
La calidad y el sabor de los plátanos transgénicos siguió siendo el mismo que en los no modificados genéticamente. Los expertos reconocen que las soluciones genéticas a las pérdidas en postcosecha permitirían reducir el consumo de energía y aumentar la seguridad alimentaria, en especial en un cultivo como el del plátano, componente alimentario presente en todo el mundo.