Resultados prometedores con papa GM resistente al tizón tardío
Científicos británicos han desarrollado papas GM resistentes al tizón tardío de la papa, una de las enfermedades más devastadoras del tubérculo. Los ensayos han sido exitosos.
Científicos británicos han desarrollado papas GM resistentes al tizón tardío de la papa, una de las enfermedades más devastadoras del tubérculo. Los ensayos han sido exitosos.
Durante tres años, investigadores británicos han llevado a cabo pruebas de campo con estas papas GM, evaluando su desempeño en un ambiente y en condiciones ideales para que se desarrolle la enfermedad. En una de las pruebas de campo, todas las plantas convencionales de papa fueron infectadas, ninguna se salvó; sin embargo, las plantas GM se mantuvieron completamente resistentes durante toda la prueba y hasta el final de la misma.
También hubo una diferencia en el rendimiento, pues cada bloque de 16 plantas de papas genéticamente modificadas pesaba entre 6 y 13 kg, mientras que las convencionales pesaban entre 1,6 y 5 kg por bloque. Es decir, prácticamente se duplicó el rendimiento con la variedad GM.
Las papas son particularmente vulnerables al tizón tardío, una enfermedad causada por un hongo que se desarrolla muy bien en condiciones de humedad, muy frecuentes durante la temporada de siembra en Europa. El tizón tardío de la papa es una de las pesadillas de los agricultores, pues los ha afectado durante generaciones y fue la causante de la hambruna irlandesa en la década de 1840.
Para desarrollar esta papa GM los investigadores introdujeron en la variedad conocida como Desiree un gen de una papa silvestre de Sudamérica que ayuda a la planta a activar sus defensas naturales para combatir el tizón.
Los investigadores consideran que el uso de técnicas para incluir genes fue crucial para el desarrollo de esta papa GM. “El mejoramiento entre parientes silvestres es laborioso y lento, y para cuando un gen ya ha sido introducido con éxito en una variedad, puede que el patógeno del tizón tardío ya haya desarrollado la capacidad para superarlo”, aseguró el profesor Jonathan Jones, del Laboratorio Sainsbury y autor principal de la investigación.
La velocidad con la que se propaga la infección y los impactos devastadores en la cosecha hace que sea la principal amenaza del cultivo, poniendo en riesgo 6 millones de toneladas de papas que se producen en el Reino Unido.
Es por esto que el desarrollo de una papa genéticamente modificada resistente al tizón tardío podría brindar grandes beneficios a los agricultores, quienes tendrían un mayor rendimiento en sus cosechas por reducción en las pérdidas causadas por la enfermedad.
Adicionalmente los agricultores realizarían la actividad agrícola de una forma ambientalmente más sostenible, pues reducirían las aplicaciones de fitosanitarios para controlar la enfermedad.
Nota: el tizón tardío (o mildiu) es una enfermedad causada por Phytophthora infestans, un oomicete que infecta a las papas, tomates y a otras solanáceas, causando importantes pérdidas. Fue el causante principal de la gran hambruna irlandesa de 1845-1849 y de la gran hambruna escocesa de 1846-1857.
Durante tres años, investigadores británicos han llevado a cabo pruebas de campo con estas papas GM, evaluando su desempeño en un ambiente y en condiciones ideales para que se desarrolle la enfermedad. En una de las pruebas de campo, todas las plantas convencionales de papa fueron infectadas, ninguna se salvó; sin embargo, las plantas GM se mantuvieron completamente resistentes durante toda la prueba y hasta el final de la misma.
También hubo una diferencia en el rendimiento, pues cada bloque de 16 plantas de papas genéticamente modificadas pesaba entre 6 y 13 kg, mientras que las convencionales pesaban entre 1,6 y 5 kg por bloque. Es decir, prácticamente se duplicó el rendimiento con la variedad GM.
Las papas son particularmente vulnerables al tizón tardío, una enfermedad causada por un hongo que se desarrolla muy bien en condiciones de humedad, muy frecuentes durante la temporada de siembra en Europa. El tizón tardío de la papa es una de las pesadillas de los agricultores, pues los ha afectado durante generaciones y fue la causante de la hambruna irlandesa en la década de 1840.
Para desarrollar esta papa GM los investigadores introdujeron en la variedad conocida como Desiree un gen de una papa silvestre de Sudamérica que ayuda a la planta a activar sus defensas naturales para combatir el tizón.
Los investigadores consideran que el uso de técnicas para incluir genes fue crucial para el desarrollo de esta papa GM. “El mejoramiento entre parientes silvestres es laborioso y lento, y para cuando un gen ya ha sido introducido con éxito en una variedad, puede que el patógeno del tizón tardío ya haya desarrollado la capacidad para superarlo”, aseguró el profesor Jonathan Jones, del Laboratorio Sainsbury y autor principal de la investigación.
La velocidad con la que se propaga la infección y los impactos devastadores en la cosecha hace que sea la principal amenaza del cultivo, poniendo en riesgo 6 millones de toneladas de papas que se producen en el Reino Unido.
Es por esto que el desarrollo de una papa genéticamente modificada resistente al tizón tardío podría brindar grandes beneficios a los agricultores, quienes tendrían un mayor rendimiento en sus cosechas por reducción en las pérdidas causadas por la enfermedad.
Adicionalmente los agricultores realizarían la actividad agrícola de una forma ambientalmente más sostenible, pues reducirían las aplicaciones de fitosanitarios para controlar la enfermedad.
Nota: el tizón tardío (o mildiu) es una enfermedad causada por Phytophthora infestans, un oomicete que infecta a las papas, tomates y a otras solanáceas, causando importantes pérdidas. Fue el causante principal de la gran hambruna irlandesa de 1845-1849 y de la gran hambruna escocesa de 1846-1857.