Panamá espera beneficios del primer salmón transgénico
El salmón transgénico crece en estanques en tierra firme al oeste de Panamá. Investigadores de Panamá han desempeñado un papel crucial en la creación de un salmón de rápido crecimiento que pronto podría convertirse en el primer animal genéticamente modificado (GM) en ser comercializado.
El salmón transgénico crece en estanques en tierra firme al oeste de Panamá. Investigadores de Panamá han desempeñado un papel crucial en la creación de un salmón de rápido crecimiento que pronto podría convertirse en el primer animal genéticamente modificado (GM) en ser comercializado.
La Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por su sigla en inglés) ha dictaminado que el consumo de salmón transgénico es tan seguro como el del salmón del Atlántico convencional, y ahora está analizando los comentarios públicos sobre su impacto ambiental, último paso en el proceso de aprobación.
Si la FDA permite que el salmón transgénico sea importado para consumo humano -lo que la empresa que desarrolló el pescado espera que ocurra este año-, la estación de investigación en Panamá que lo está estudiando podría empezar a producirlo para el mercado de Estados Unidos.
Esto tendría un “efecto de goteo” que beneficiaría a las firmas locales y aseguraría más estudios sobre el salmón GM y la mejor forma de cultivarlo, dice Henry Clifford, vicepresidente de mercadeo y ventas de AquaBounty Technologies, la compañía de biotecnología estadounidense que desarrolló el pescado, denominado salmón AquAdvantage, y el cual crece dos veces más rápido que el salmón silvestre.
El proyecto ha sido establecido en Panamá debido a la tradicional política del país de apoyar la acuicultura y los organismos genéticamente modificados, explica Clifford.
Añade que todos los empleados de la estación de investigación en Panamá son investigadores locales y que una de las razones por las que la compañía decidió establecer sus instalaciones allí fue por su “vasto equipo de biólogos y administradores experimentados, con muchos años de experiencia exitosa en el manejo de operaciones acuícolas”.
Beneficios locales
La compañía asegura que el proyecto ya está llevando nuevas tecnologías y conocimiento a Panamá.
“Desde que el proyecto empezó en 2009, profesionales en I+D que trabajan para las autoridades panameñas han estado íntimamente involucrados en la supervisión de nuestro proyecto”, dice Clifford. “Por lo tanto, existe un proceso en el que AquaBounty está transfiriendo tecnología y conocimientos técnicos a científicos, investigadores y otros profesionales panameños”.
Si la FDA aprueba la importación del salmón, AquaBounty solicitará el permiso de Panamá para convertir las instalaciones de investigación en un sitio de producción -aunque es probable que también mantenga sus actividades de I+D.
“Por ejemplo, podríamos trabajar con los productores de alimento locales para desarrollar mejores fórmulas para alimentar a nuestro salmón”, dice Clifford. La compañía también vislumbra beneficios para las firmas locales.
“A medida que proyectos de acuicultura se desarrollan en Panamá, hay beneficios económicos tangibles para negocios complementarios como fábricas de piensos y plantas de embalaje”, apunta Clifford.
En un borrador de su evaluación ambiental, publicado en diciembre de 2012, la FDA señaló que el “alimento proveniente del salmón AquAdvantage es tan seguro como el alimento que proviene del salmón del Atlántico convencional, y que existe una certeza razonable sobre la inocuidad [del pescado]”.
También dice que no existe un riesgo significativo para el ambiente cuando el pescado es cultivado en estanques rodeados de tierra.
El periodo oficial de consulta pública establecido por la FDA sobre ese informe, uno de los últimos pasos en el proceso de aprobación, concluyó el 26 de abril.
“No hemos recibido ninguna indicación por parte de la FDA sobre cuánto tardará en procesar todos los comentarios”, dice Clifford a SciDev.Net. “Esperamos la aprobación antes de que termine el año”.
Giovanni Lauri, director de la Autoridad de Recursos Acuáticos de Panamá (ARAP), señala a SciDev.Net que la aprobación de la FDA podría impulsar la inversión de compañías que buscan cultivar animales transgénicos como fuente de alimento.
“Panamá está abierta a este tipo de investigación siempre y cuando las compañías cumplan con los requisitos establecidos por nuestras leyes” en materia de seguridad alimentaria e impacto ambiental”, agrega.
Para Lauri, el trabajo de AquaBounty también demuestra que alimentos producidos en la mitad del tiempo -el salmón GM crece dos veces más rápido- podría ayudar a combatir el hambre y la sobrepesca.
Preocupación por el medioambiente
Para minimizar el riesgo de un daño potencial al ambiente, todos los salmones GM son hembras estériles y se crían únicamente en las instalaciones de tierra firme de la compañía ubicadas en el pueblo de Boquete, en las tierras altas del oeste de Panamá.
Y, a solicitud de la ARAP, por el momento todo el pescado que AquaBounty produce debe ser sacrificado.
Pero existe el temor de que si el salmón transgénico entra alguna vez en contacto con fuentes naturales de agua podría cruzarse con peces silvestres y producir efectos desconocidos.
Por ejemplo, un estudio publicado el mes pasado en Proceedings of the Royal Society B reveló que cruzar el salmón GM con una especie de trucha común silvestre con la que el salmón está emparentado, puede producir un pescado muy competitivo, de rápido crecimiento, y capaz de aventajar a las versiones silvestre y transgénica.
Luisa Araúz, abogada en el Centro de Incidencia Ambiental de Panamá, una ONG que ofrece apoyo legal a grupos de la sociedad civil en temas ambientales, ha estado investigando si AquaBounty Technologies y las autoridades de Panamá están tomando las medidas necesarias para prevenir daños al ambiente.
Aunque hasta el momento las evaluaciones sobre el impacto ambiental del salmón de AquaBounty han encontrado riesgos mínimos, Araúz dice que “nuestra preocupación es que de ese riesgo mínimo pueda producirse una catástrofe si estos pescados escapan” a hábitats naturales.
“Queremos que las autoridades mantengan la vigilancia”, dice Araúz a SciDev.Net.
Abriendo las compuertas
Richard Pretto, consultor independiente en temas de acuicultura y quien ha trabajado en este campo para los sectores público y privado en Panamá durante los últimos 40 años, confía en que la FDA aprobará finalmente el salmón.
“La FDA se está tomando su tiempo porque si aprueba el salmón, otras especies como la tilapia y la trucha podrían ser las siguientes. Pero Estados Unidos no puede seguir oponiéndose [al salmón GM como fuente de alimento] porque ellos mismos son líderes en esta tecnología”, dice Pretto a SciDev.Net.
Si la FDA decide no conceder su aprobación, añade Pretto, sería un revés para la ciencia, aunque el desarrollo de pescado GM “ya es imparable y otros países como China y Brasil continuarán con sus propias investigaciones”.
Clifford señala que la aprobación de la FDA “sería una señal para el mundo, y para otros promotores e investigadores de animales genéticamente modificados, así como para las autoridades encargadas de regularlos, que, administrada para reducir los riesgos e implementada responsable y apropiadamente, esta tecnología es segura para el consumidor y para el ambiente.
“Hay un número sustancial de compañías y de organizaciones de I+D con animales GM ya en etapa de desarrollo que están observando con gran interés nuestra solicitud ante la FDA”.
Si la aprobación es concedida, añade, incentivará a otras compañías a continuar desarrollando sus productos, con el conocimiento de que el alimento que proviene de animales GM puede ser regulado y comercializado casi de la misma forma en que lo han estado las plantas GM en los últimos 15 años.
La Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por su sigla en inglés) ha dictaminado que el consumo de salmón transgénico es tan seguro como el del salmón del Atlántico convencional, y ahora está analizando los comentarios públicos sobre su impacto ambiental, último paso en el proceso de aprobación.
Si la FDA permite que el salmón transgénico sea importado para consumo humano -lo que la empresa que desarrolló el pescado espera que ocurra este año-, la estación de investigación en Panamá que lo está estudiando podría empezar a producirlo para el mercado de Estados Unidos.
Esto tendría un “efecto de goteo” que beneficiaría a las firmas locales y aseguraría más estudios sobre el salmón GM y la mejor forma de cultivarlo, dice Henry Clifford, vicepresidente de mercadeo y ventas de AquaBounty Technologies, la compañía de biotecnología estadounidense que desarrolló el pescado, denominado salmón AquAdvantage, y el cual crece dos veces más rápido que el salmón silvestre.
El proyecto ha sido establecido en Panamá debido a la tradicional política del país de apoyar la acuicultura y los organismos genéticamente modificados, explica Clifford.
Añade que todos los empleados de la estación de investigación en Panamá son investigadores locales y que una de las razones por las que la compañía decidió establecer sus instalaciones allí fue por su “vasto equipo de biólogos y administradores experimentados, con muchos años de experiencia exitosa en el manejo de operaciones acuícolas”.
Beneficios locales
La compañía asegura que el proyecto ya está llevando nuevas tecnologías y conocimiento a Panamá.
“Desde que el proyecto empezó en 2009, profesionales en I+D que trabajan para las autoridades panameñas han estado íntimamente involucrados en la supervisión de nuestro proyecto”, dice Clifford. “Por lo tanto, existe un proceso en el que AquaBounty está transfiriendo tecnología y conocimientos técnicos a científicos, investigadores y otros profesionales panameños”.
Si la FDA aprueba la importación del salmón, AquaBounty solicitará el permiso de Panamá para convertir las instalaciones de investigación en un sitio de producción -aunque es probable que también mantenga sus actividades de I+D.
“Por ejemplo, podríamos trabajar con los productores de alimento locales para desarrollar mejores fórmulas para alimentar a nuestro salmón”, dice Clifford. La compañía también vislumbra beneficios para las firmas locales.
“A medida que proyectos de acuicultura se desarrollan en Panamá, hay beneficios económicos tangibles para negocios complementarios como fábricas de piensos y plantas de embalaje”, apunta Clifford.
En un borrador de su evaluación ambiental, publicado en diciembre de 2012, la FDA señaló que el “alimento proveniente del salmón AquAdvantage es tan seguro como el alimento que proviene del salmón del Atlántico convencional, y que existe una certeza razonable sobre la inocuidad [del pescado]”.
También dice que no existe un riesgo significativo para el ambiente cuando el pescado es cultivado en estanques rodeados de tierra.
El periodo oficial de consulta pública establecido por la FDA sobre ese informe, uno de los últimos pasos en el proceso de aprobación, concluyó el 26 de abril.
“No hemos recibido ninguna indicación por parte de la FDA sobre cuánto tardará en procesar todos los comentarios”, dice Clifford a SciDev.Net. “Esperamos la aprobación antes de que termine el año”.
Giovanni Lauri, director de la Autoridad de Recursos Acuáticos de Panamá (ARAP), señala a SciDev.Net que la aprobación de la FDA podría impulsar la inversión de compañías que buscan cultivar animales transgénicos como fuente de alimento.
“Panamá está abierta a este tipo de investigación siempre y cuando las compañías cumplan con los requisitos establecidos por nuestras leyes” en materia de seguridad alimentaria e impacto ambiental”, agrega.
Para Lauri, el trabajo de AquaBounty también demuestra que alimentos producidos en la mitad del tiempo -el salmón GM crece dos veces más rápido- podría ayudar a combatir el hambre y la sobrepesca.
Preocupación por el medioambiente
Para minimizar el riesgo de un daño potencial al ambiente, todos los salmones GM son hembras estériles y se crían únicamente en las instalaciones de tierra firme de la compañía ubicadas en el pueblo de Boquete, en las tierras altas del oeste de Panamá.
Y, a solicitud de la ARAP, por el momento todo el pescado que AquaBounty produce debe ser sacrificado.
Pero existe el temor de que si el salmón transgénico entra alguna vez en contacto con fuentes naturales de agua podría cruzarse con peces silvestres y producir efectos desconocidos.
Por ejemplo, un estudio publicado el mes pasado en Proceedings of the Royal Society B reveló que cruzar el salmón GM con una especie de trucha común silvestre con la que el salmón está emparentado, puede producir un pescado muy competitivo, de rápido crecimiento, y capaz de aventajar a las versiones silvestre y transgénica.
Luisa Araúz, abogada en el Centro de Incidencia Ambiental de Panamá, una ONG que ofrece apoyo legal a grupos de la sociedad civil en temas ambientales, ha estado investigando si AquaBounty Technologies y las autoridades de Panamá están tomando las medidas necesarias para prevenir daños al ambiente.
Aunque hasta el momento las evaluaciones sobre el impacto ambiental del salmón de AquaBounty han encontrado riesgos mínimos, Araúz dice que “nuestra preocupación es que de ese riesgo mínimo pueda producirse una catástrofe si estos pescados escapan” a hábitats naturales.
“Queremos que las autoridades mantengan la vigilancia”, dice Araúz a SciDev.Net.
Abriendo las compuertas
Richard Pretto, consultor independiente en temas de acuicultura y quien ha trabajado en este campo para los sectores público y privado en Panamá durante los últimos 40 años, confía en que la FDA aprobará finalmente el salmón.
“La FDA se está tomando su tiempo porque si aprueba el salmón, otras especies como la tilapia y la trucha podrían ser las siguientes. Pero Estados Unidos no puede seguir oponiéndose [al salmón GM como fuente de alimento] porque ellos mismos son líderes en esta tecnología”, dice Pretto a SciDev.Net.
Si la FDA decide no conceder su aprobación, añade Pretto, sería un revés para la ciencia, aunque el desarrollo de pescado GM “ya es imparable y otros países como China y Brasil continuarán con sus propias investigaciones”.
Clifford señala que la aprobación de la FDA “sería una señal para el mundo, y para otros promotores e investigadores de animales genéticamente modificados, así como para las autoridades encargadas de regularlos, que, administrada para reducir los riesgos e implementada responsable y apropiadamente, esta tecnología es segura para el consumidor y para el ambiente.
“Hay un número sustancial de compañías y de organizaciones de I+D con animales GM ya en etapa de desarrollo que están observando con gran interés nuestra solicitud ante la FDA”.
Si la aprobación es concedida, añade, incentivará a otras compañías a continuar desarrollando sus productos, con el conocimiento de que el alimento que proviene de animales GM puede ser regulado y comercializado casi de la misma forma en que lo han estado las plantas GM en los últimos 15 años.