Nuevas enzimas degradadoras de la biomasa obtenidas de un hongo intestinal de los caballos
Investigadores de la Universidad de California y sus colaboradores del MIT y de la Universidad de Harvard han aislado una nueva especie de hongo del tracto digestivo de los caballos que presenta una elevada capacidad enzimática contra los materiales celulósicos y lignocelulósicos.
Investigadores de la Universidad de California y sus colaboradores del MIT y de la Universidad de Harvard han aislado una nueva especie de hongo del tracto digestivo de los caballos que presenta una elevada capacidad enzimática contra los materiales celulósicos y lignocelulósicos.
Científicos estadounidenses han aislado una nueva especie de hongo del tracto digestivo de los caballos que presenta una elevada capacidad enzimática contra los materiales celulósicos y lignocelulósicos. La disgregación enzimática de la celulosa entramada con el duro polímero que es la lignina en el material biomásico constituye un serio problema para la transformación de biocombustible.
Los investigadores han estudiado el sistema digestivo de grandes herbívoros como las vacas y los caballos en busca de enzimas microbianas capaces de degradar eficazmente los sustratos de celulosa y lignocelulosa y obtener azúcares simples que fermentar para producir etanol. Los estudios realizados hasta ahora se habían centrado en las bacterias intestinales, pero los investigadores creen que los hongos intestinales representan una importante fuente de digestores de celulosa que secretan singulares y potentes complejos enzimáticos. Un estudio reciente realizado por los investigadores de la Universidad de California en Santa Bárbara y sus colaboradores del Instituto Tecnológico de Massachusetts y de la Universidad de Harvard investiga los hongos intestinales que habitan en el tracto intestinal de los caballos capaces de digerir hierba rica en lignina.
En su informe presentado en la 245ª Reunión y Exposición Nacional de la Sociedad Química Americana, los investigadores describen el descubrimiento de una nueva especie de hongo intestinal anaeróbico y de las nuevas enzimas degradadoras de biomasa o «celulolíticas» que produce.
Analizando el transcriptoma del hongo -el conjunto de material genético codificador de proteínas-, el equipo de investigación pudo identificar directamente y ensamblar la codificación de genes de las enzimas capaces de disgregar los sustratos celulósicos y lignocelulósicos. Actualmente tratan de identificar las enzimas más activas de este conjunto y transferir a levaduras los genes fúngicos que producen dichas enzimas, para aplicarlas a la producción industrial a gran escala.
Científicos estadounidenses han aislado una nueva especie de hongo del tracto digestivo de los caballos que presenta una elevada capacidad enzimática contra los materiales celulósicos y lignocelulósicos. La disgregación enzimática de la celulosa entramada con el duro polímero que es la lignina en el material biomásico constituye un serio problema para la transformación de biocombustible.
Los investigadores han estudiado el sistema digestivo de grandes herbívoros como las vacas y los caballos en busca de enzimas microbianas capaces de degradar eficazmente los sustratos de celulosa y lignocelulosa y obtener azúcares simples que fermentar para producir etanol. Los estudios realizados hasta ahora se habían centrado en las bacterias intestinales, pero los investigadores creen que los hongos intestinales representan una importante fuente de digestores de celulosa que secretan singulares y potentes complejos enzimáticos. Un estudio reciente realizado por los investigadores de la Universidad de California en Santa Bárbara y sus colaboradores del Instituto Tecnológico de Massachusetts y de la Universidad de Harvard investiga los hongos intestinales que habitan en el tracto intestinal de los caballos capaces de digerir hierba rica en lignina.
En su informe presentado en la 245ª Reunión y Exposición Nacional de la Sociedad Química Americana, los investigadores describen el descubrimiento de una nueva especie de hongo intestinal anaeróbico y de las nuevas enzimas degradadoras de biomasa o «celulolíticas» que produce.
Analizando el transcriptoma del hongo -el conjunto de material genético codificador de proteínas-, el equipo de investigación pudo identificar directamente y ensamblar la codificación de genes de las enzimas capaces de disgregar los sustratos celulósicos y lignocelulósicos. Actualmente tratan de identificar las enzimas más activas de este conjunto y transferir a levaduras los genes fúngicos que producen dichas enzimas, para aplicarlas a la producción industrial a gran escala.