Productores de Bolivia piden utilizar la biotecnología agrícola
La organización que reúne a los productores de trigo y oleaginosas de Bolivia, están a favor del uso de la biotecnología para el arroz y el trigo.
La organización que reúne a los productores de trigo y oleaginosas de Bolivia, están a favor del uso de la biotecnología para el arroz y el trigo.
La Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo de Bolivia -Anapo-, solicitó a las autoridades de ese país la aprobación de una normativa que permita la aplicación de la biotecnología en la producción de arroz y trigo para incrementar su productividad.
Hasta el momento en Bolivia sólo está autorizada la siembra y comercialización de soja genéticamente modificada. En el 2009, este país sembró 800 mil hectáreas con soja GM.
De acuerdo con el presidente de la Anapo, Demetrio Pérez, la producción de soja transgénica permitió la obtención de un grano de mayor calidad que la convencional. "En la actualidad en el agro cruceño se aplica la producción de soja transgénica con resistencia a herbicida; con la biotecnología se podrían producir granos resistentes a la sequía", afirmó Pérez.
Para el experto brasilero Jorge Attie señaló que la biotecnología permite "no sólo una mejora alimentaria, sino también reducir el hambre en el mundo".
Destaca dentro de las ventajas de la biotecnología el aporte al medio ambiente con la disminución del uso de agua, la menor pulverización de químicos, además de la reducción del consumo de diésel en la actividad agrícola, con una importante disminución de emisiones de CO2 (dióxido de carbono).
Y agregó "desde que la biotecnología fue finalmente aceptada e incorporada al agro en Brasil, los agricultores ganaron cerca de 4 mil millones de dólares por el uso de esa tecnología (...) La biotecnología aumentó la producción de soja en Brasil y hoy un 76% es transgénico; otro tanto pasó con el maíz, cuyo cultivo es un 56% transgénico".
Por su parte, Carlos Buzio, presidente de CropLife Latin America, considera que se debe tomar en cuenta que mientras la humanidad va en aumento cada año, a la par se van reduciendo las extensiones de tierra cultivable.
"En 1950 la población era de sólo 2.500 millones y la disponibilidad era de 1.300 millones de hectáreas para ello; el año 2020 seremos 7.500 millones de personas y el área cultivable máxima habrá subido sólo a 1.500 millones de hectáreas, lo que nos enfrenta a la odisea de generar un 70% más de alimentos con la misma cantidad de tierra. De acuerdo con la legislación actual de Bolivia frente a los OGM, el artículo el artículo 409 de la Constitución Política del Estado (CPE) señala que la producción, importación y comercialización serán reguladas por ley.