Calculan la cantidad de gas metano que se puede producir a partir de basura forestal
Por la disponibilidad de viruta y aserrín en los aserraderos y carpinterías del Chaco, en la Facultad de Ingeniería de la UNNE realizan un estudio para determinar la cantidad de gas metano que se puede producir con las maderas del chaco. Se utilizaron especies de árboles como el algarrobo o el pino.
Pablo Martina, Emilio García Solá, Juan Corace y Raquel Aeberhard son integrantes del Departamento de Termodinámica de Ingeniería y Máquinas Térmicas y fueron los encargados de realizar el estudio, que en sus diferentes etapas lleva más de 7 años de trabajo. Intentaron determinar qué posibilidades existen de utilizar la basura forestal para producir gas.
Este Departamento de Termodinámica y Máquinas Térmicas está integrado por docentes de diferentes cátedras. Y parte de este plantel de ingenieros químicos, electromecánicos, en construcciones, arquitectura y ciencias físicas decidieron atender a la demanda de formación y de investigación en lo referente a problemas energéticos vinculados al uso de fuentes alternativas. Allí se conformó el Grupo de Investigación de Energías Renovables (GIDER), el cual tiene a cargo el trabajo.
Introducción teórica.El Departamento de Termodinámica de la Facultad de Ingeniería de la UNNE se encuentra trabajando hace ya más de siete años en la realización de ensayos de biodigestión, justamente para determinar la cantidad de gas metano que producen las especies madereras de la zona. Los científicos que trabajan allí y que encararon el emprendimiento científico, explicaron que la Región Chaqueña tiene gran cantidad de aserraderos, carpinterías, obrajes, bosques y otras industrias donde se produce gran cantidad de virutas y aserrines. Estos elementos son considerados “basura forestal” y no tienen un uso específico.
“La idea de esta investigación es tratar de determinar específicamente cuanto biogás producen las especies más importantes”, aseguran los profesionales en el trabajo. En una primera etapa se determinó la cantidad de biogás que produce la digestión de la madera de pino, y en la segunda etapa, más actual, se trata de determinar el mismo valor para el algarrobo.
Algarrobo. El Algarrobo Chaqueño negro (Prosopis Nigra) es la especie maderable por excelencia de la región chaqueña. Como consecuencia de su manufactura e industrialización quedan en los aserraderos, carpinterías y obrajes, montañas de virutas y aserrines cuya acumulación entraña peligros e inconvenientes, sostienen los investigadores en un reporte de su trabajo al que accedió Ciencia y Técnica.
Y detallan estos potenciales peligros o problemas: riesgo de incendio, contaminación del aire y proliferación de alimañas. “Actualmente estos desechos se queman o entierran o se dejan de lado. Todos estos residuos se podrán colocar en un biorreactor y generar una cantidad de biogás que se puede usar para calefacción, cocción o fuerza motriz, y todo con una materia prima que de otra manera se tiraría”, remarcan. Y allí comienza la investigación.
Trabajo. Más allá de estas cualidades que se pueden extraer a través del birreactor ya mencionadas y sólo utilizando la basura forestal, los científicos hacen una salvedad: “el rendimiento de la producción de biogás es muy bajo, ya que de todo la materia orgánica, la madera es la que menos produce biogás”. Pero aún así siguen adelante. “El bajo rendimiento del biogás de madera se compensa debido a que la existencia de los desechos es altísima y gratuita”, dicen.