Lanzan la primera yerba con prebióticos - Contiene polidextrosa y ayuda a mejorar la función intestinal
La moda de los alimentos funcionales -aquellos que han sido adicionados con elementos benéficos para la salud- llegó a la yerba mate. Lo que era de esperar, tratándose de un producto que está presente en el 93% de los hogares argentinos.
La moda de los alimentos funcionales -aquellos que han sido adicionados con elementos benéficos para la salud- llegó a la yerba mate. Lo que era de esperar, tratándose de un producto que está presente en el 93% de los hogares argentinos. Días atrás fue lanzada al mercado la primera yerba mate con prebióticos: CBSé Regularis contiene polidextrosa, un polisacárido sintético capaz de estimular el crecimiento de bacterias intestinales benéficas y de inhibir el desarrollo de otras capaces de causar enfermedad. "La polidextrosa, que actualmente se emplea como aditivo en distintos productos alimenticios, en los que actúa como estabilizador o espesante, ha demostrado que puede ser considerada una fibra parcialmente soluble, ya que es fermentada en el intestino, donde ayuda a mejorar la función intestinal", dijo durante la presentación del producto a la prensa la bioquímica María Cristina López, que participó en su desarrollo. En cantidades superiores a los 3 gramos diarios, la polidextrosa ayuda a mejorar la función intestinal, pero también promueve el crecimiento de bacterias benéficas, como las bifidobacterias y los lactobacilos, y tras ser fermentada por la microflora intestinal da lugar a un descenso del PH (acidez) intestinal, lo que inhibe el crecimiento de microorganismos patógenos ( B. fragilis, B. vulgatus o B. intermedius ). Uno de los factores que llevaron a su elección es que la polidextrosa no se degrada a la temperatura a la que se ceba el mate. "Además es considerada segura en cualquier concentración", comentó López. Por otro lado, esta bioquímica advirtió que "esta yerba representa un aporte mayor de fibras, pero con tomar mate uno no cubre los requerimientos diarios", que son los que se asocian con los efectos benéficos de las fibras, como la polidextrosa. "Los alimentos funcionales logran sus efectos siempre que sean consumidos en el marco de un dieta saludable y equilibrada. Los alimentos funcionales no curan, pero sí pueden ayudar a reducir el riesgo de sufrir ciertas enfermedades", concluyó López.