Trabajan para mejorar genéticamente pasturas que beneficiarán a la producción ganadera regional
La producción ganadera en el nordeste de la Argentina está basada en la productividad de pastizales naturales. En la región hay especies de gramíneas y leguminosas con potencial forrajero. El mejoramiento genético de estas especies permitiría generar cultivares productivos y con buen valor nutritivo.
Actualmente se cultivan en la región pasturas introducidas principalmente de África que muestran serios problemas de adaptación. Por ello, el mejoramiento genético de gramíneas y leguminosas nativas es una opción adecuada. En este contexto, el género Paspalum de gramíneas es uno de los grupos taxonómicos con mayor potencial debido a la buena producción de forraje, tolerancia al pastoreo y a la variabilidad genética existente en el área.
Este género vegetal fue el elegido por el grupo de investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), integrado por el doctor Carlos Acuña, para su análisis y posterior mejoramiento genético. "En general estas especies presentan un sistema reproductivo complejo que incluye citotipos diploides sexuales y poliploides sexuales o apomícticos. "La apomixis es un tipo de reproducción asexual por semillas que origina descendientes genéticamente idénticos a la planta madre", explicó el ingeniero agrónomo.
A través de esta investigación, los profesionales están evaluando el potencial de este carácter para fijar híbridos con cualidades forrajeras superiores. Asimismo, pretenden identificar grupos de individuos que al cruzarse produzcan progenie con un vigor superior para características de interés agronómico. Los cruzamientos se llevaron a cabo entre diciembre del 2009 y abril de este año, recordó el docente, profesor adjunto de la cátedra de Forrajicultura de la mencionada facultad e investigador del CONICET.
Líneas de trabajo
"Usando marcadores moleculares y características morfofiológicas estamos analizando la variabilidad genética contenida entre y dentro de poblaciones nativas de Paspalum", mencionó a la revista Ciencia y Técnica de la UNNE el doctor Acuña. "Además de la variabilidad genética, el objetivo del trabajo fue estudiar el vigor híbrido resultante de cruzamientos entre padres con distintos grados de parentesco", añadió luego el profesional.
Al respecto, en el grupo de trabajo de la Facultad de Ciencias Agrarias integrado por Camilo Quarin, Eric Martínez, Francisco Espinoza y Mario Urbani "hace más de 20 años se viene estudiando los sistemas genéticos en distintas especies de Paspalum". Asimismo, mencionó que en el Instituto de Botánica del Nordeste existe un banco de germoplasma en el cual se guarda material vegetal como semillas, y plantas vivas para poder desarrollar las respectivas investigaciones.
"Inclusive en el grupo se liberaron 2 cultivares de pasto denominados Cambá FCA y Chané FCA", dijo Acuña; a la vez que explicó que se trata de materiales pioneros en el NEA.
"Este proyecto aspira a generar información de interés internacional acerca del potencial del carácter apomixis para el mejoramiento de gramíneas y sobre la efectividad del uso de marcadores moleculares como una herramienta para el mejoramiento de cultivos. Paralelamente se pretende iniciar un programa de mejoramiento genético basado en la hibridación y fijación de híbridos apomícticos que responda a una necesidad regional de primera importancia socioeconómica", resaltó el ingeniero.
Impacto socio-económico y productivo
Según relató Acuña, este proyecto pretende responder directamente a la necesidad existente en la región nordeste del país de incrementar la productividad de sistemas de producción de carne y leche vacuna. "Existe el potencial de aumentar la productividad animal de estos sistemas a través del uso de cultivares forrajeros mejorados. Sin embargo, el proceso de mejoramiento genético de forrajeras consiste en múltiples fases y es sin duda extenso", evaluó. "Estos potenciales cultivares también tendrían un posible impacto a nivel internacional debido al interés de otras regiones del mundo de evaluar nuevas variedades desarrolladas para ambientes con similares características". Por caso, instituciones interesadas en evaluar nuevas variedades de especies de Paspalum lo constituye el programa de mejoramiento vegetal de University of Florida, resaltó.
"La intensificación de sistemas de producción vacuna del nordeste Argentino tendría un fuerte efecto social al tener el potencial de aumentar el requerimiento de mano de obra local. En estos momentos los sistemas de producción vacuna del nordeste argentino ocupan enormes extensiones que requieren escasa mano de obra. La incorporación de pasturas cultivadas va a requerir de un manejo semi-intensivo del sistema productivo lo cual resultaría en más puestos de trabajo y en el requerimiento de mano de obra más capacitada", subrayó Acuña, quien permaneció 5 años en Estados Unidos donde realizó su maestría y doctorado en la Universidad de Florida; y fue galardonado académica y científicamente -por sus investigaciones en mejoramiento genético de cultivos forrajeros- en varias oportunidades en el país.