5 Consejos para Comunicar sobre Biotecnología

El desafío cuando comunicamos sobre biotecnología es que muchas veces los que más se oponen son los que menos saben o comprenden el tema (Extreme opponents of genetically modified foods know the least but think they know the most, Fernbach et al 2019). Debido a que la percepción pública influye en la aceptación de los transgénicos, la comunicación sobre su seguridad a los distintos públicos es crucial. La desinformación es perjudicial.

El desafío cuando comunicamos sobre biotecnología es que muchas veces los que más se oponen son los que menos saben o comprenden el tema (Extreme opponents of genetically modified foods know the least but think they know the most, Fernbach et al 2019). Debido a que la percepción pública influye en la aceptación de los transgénicos, la comunicación sobre su seguridad a los distintos públicos es crucial. La desinformación es perjudicial.

Acá resumimos 5 recomendaciones para comunicar sobre biotecnología y temas controversiales:

1. Escuchar las preocupaciones de la audiencia empáticamente. Muchas de las preocupaciones de la gente provienen de los mitos y las noticias falsas que se difunden rápidamente, dominan el escenario y son difíciles de refutar. No todos tenemos los mismos conocimientos de fondo, ni especialidad o preferencias y muchas veces tomamos como cierta una noticia sin entender verdaderamente la ciencia o fundamentos detrás de ella. Debemos identificar las preocupaciones de la gente.


2. No desestimar o minimizar esas preocupaciones. Una vez que identificamos las preocupaciones debemos saber que, aunque algunas no tengan fundamento, son preocupaciones reales y que muchas veces condicionan la aceptación de una determinada tecnología. Las preocupaciones de la audiencia deben ser tenidas en cuenta.


3. Ayudar a la audiencia a identificar la laguna de conocimiento. Justamente porque no se puede ser experto en todo, muchas veces tomamos una posición sin tener claro cuáles son los fundamentos sobre los que se apoya. Tratar de identificar esos fundamentos o reconocer que no se tiene la base para decidir si una noticia es veraz o es sólo rumor es un gran paso. Una vez que identificamos que necesitamos más información para chequear la pieza podemos ponernos en campaña para llenar ese vacío. Es clave conocer el tipo de información que la audiencia está demandando y necesitando.


4. Contestar las preocupaciones usando lenguaje adecuado. La información científica rara vez llega al público, el desafío es comunicar contestando las preocupaciones de la gente en un lenguaje simplificado y entendible por todos. Es importante abrir diferentes canales y entablar conversaciones con las diferentes audiencias. Desde maestros y padres hasta profesionales de la salud y responsables políticos, el objetivo es que comprendan y repliquen el mensaje.


5. Tener en cuenta que las preocupaciones cambian con el tiempo. Los temas que le preocupan a la gente evolucionaron pasando de las mariposas Monarca y los genes en nuestros alimentos a la seguridad alimentaria y cómo se producen los alimentos. Las preocupaciones difieren según la región y pueden ser contagiosas, por lo que un monitoreo constante de los problemas también es importante.

Resumiendo, ni las preocupaciones de las audiencias, ni el poder de la comunicación pueden ser subestimados. Debemos escuchar al público de manera empática, reconocer sus inquietudes, ayudarlos a identificar los puntos flojos y abordar las preocupaciones utilizando el lenguaje apropiado. Debemos ser los primeros en abordar la charla, sin más dilaciones, o bien seguiremos con la titánica tarea de aclarar lo que otros desinforman. La comunidad exige saber y como profesionales necesitamos asumir este desafío para cerrar la brecha entre la ciencia y la sociedad.