Maíz del proyecto WEMA muestra resistencia promisoria al gusano cogollero en Mozambique
Científicos han observado beneficios inesperados en pruebas a campo con el Maíz Eficiente en el uso del Agua de África (WEMA) en Mozambique. A pesar de que los materiales de maíz testeados fueron modificados genéticamente para tolerar la sequía y proteger al maíz frente al barrenador del tallo, también están mostrando resistencia, aunque parcial, al gusano cogollero.
Científicos han observado beneficios inesperados en pruebas a campo con el Maíz Eficiente en el uso del Agua de África (WEMA) en Mozambique. A pesar de que los materiales de maíz testeados fueron modificados genéticamente para tolerar la sequía y proteger al maíz frente al barrenador del tallo, también están mostrando resistencia, aunque parcial, al gusano cogollero.
Para enfrentar los problemas del cultivo de maíz, la Fundación de Tecnología para la Agricultura Africana (AATF) lanzó el proyecto Maíz Eficiente en el uso del Agua de África (WEMA). El proyecto WEMA es una iniciativa público-privada que apunta a producir y poner a disposición de los productores, materiales de maíz convencional y transgénico tolerante a sequía y resistente a insectos. Los materiales WEMA están siendo desarrollados mediante la colaboración del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) e instituciones de investigación públicas en seis países africanos (Mozambique, Tanzania, Uganda, Kenia, Sudáfrica y Etiopía) usando tecnologías donadas por la industria. Como las semillas resultantes son libres de regalías, las compañías de semilla locales pueden ofrecerlas a pequeños productores a precios asequibles.
Actualmente, los materiales WEMA están siendo evaluados en pruebas de campo confinadas de 2,5 has en Chokwe, provincia de Gaza, Mozambique. Variedades de maíz convencionales y materiales transgénicos WEMA, fueron comparados en ensayos a campo confinados el año pasado y los resultados superaron las expectativas. No se aplicaron pesticidas en ningún momento del ciclo de cultivo en ninguna de los materiales y, frente a una combinación de presión de barrenador del tallo y gusano cogollero, los materiales transgénicos WEMA rindieron un 30% más que los convencionales. Los materiales WEMA mostraron resistencia a ambos insectos.
Los resultados son importantes porque el maíz es un alimento básico en África, consumido por más de 300 millones de personas, y el barrenador es una plaga importante que destruye el cultivo, ocasionando pérdidas de rendimiento de hasta 40% en Mozambique. El gusano cogollero, que arribó al continente africano en 2016, se está demostrando igualmente destructivo en varios países.
El barrenador del tallo y el gusano cogollero son plagas especialmente destructivas porque no responden fácilmente a aplicaciones de pesticidas y se reproducen muy rápido. Actualmente, los productores tratan de controlar estas plagas mediante el uso de insecticidas, gastan mucho dinero en pesticidas, y temen que usar tantos productos pueda poner en peligro su salud. Según un reporte sobre el impacto potencial del gusano cogollero en África del Centro Internacional de Agricultura y Biociencias (CABI) del Reino Unido, en 2017, en Mozambique el gusano cogollero causó pérdidas de al menos 282.000 toneladas de maíz representando un costo de us$83,8.
Complementando los problemas de los insectos plaga están los problemas climáticos. La sequía es un gran reto que tienen que enfrentar los productores repetidamente. El cambio climático ha ocasionado pérdidas de cultivos por falta de lluvia y mucho calor, llevando a productores de Mozambique a situaciones de deuda.
En 2016, Sudáfrica fue el primer país del proyecto en comercializar maíz Bt para el uso por pequeños productores. Mozambique espera liberar el maíz transgénico WEMA como el primer organismo genéticamente modificado del país. Los científicos están entusiasmados de que el maíz Bt WEMA también esté mostrando resistencia, aunque parcial, al gusano cogollero, que se ha expandido a casi 30 países africanos, destruyendo maíz y otros cultivos. Un maíz que no necesite tantas aplicaciones de insecticidas, ayudará mucho a los productores en términos de rendimiento.
En Mozambique, la regulación para transgénicos está establecida y conduce al desarrollo de tecnología GMO. Tanto investigadores como productores, esperan un proceso sin sobresaltos que eventualmente permitirá que los materiales transgénicos WEMA salgan al mercado y lleguen a los productores. Los productores en las vecindades ya visitaron los campos donde se está probando el maíz WEMA, están entusiasmados con lo que vieron y esperan ansiosos poder usar la semilla.
Los materiales transgénicos WEMA serán muy importantes porque, incluso si se tiene un sistema de riego, siempre se puede ahorrar agua. La combinación de protección frente a insectos y mayor eficiencia en el uso del agua de maíz pueden ser claves en los esfuerzos de asegurar la provisión de alimentos para África.
Científicos han observado beneficios inesperados en pruebas a campo con el Maíz Eficiente en el uso del Agua de África (WEMA) en Mozambique. A pesar de que los materiales de maíz testeados fueron modificados genéticamente para tolerar la sequía y proteger al maíz frente al barrenador del tallo, también están mostrando resistencia, aunque parcial, al gusano cogollero.
Para enfrentar los problemas del cultivo de maíz, la Fundación de Tecnología para la Agricultura Africana (AATF) lanzó el proyecto Maíz Eficiente en el uso del Agua de África (WEMA). El proyecto WEMA es una iniciativa público-privada que apunta a producir y poner a disposición de los productores, materiales de maíz convencional y transgénico tolerante a sequía y resistente a insectos. Los materiales WEMA están siendo desarrollados mediante la colaboración del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) e instituciones de investigación públicas en seis países africanos (Mozambique, Tanzania, Uganda, Kenia, Sudáfrica y Etiopía) usando tecnologías donadas por la industria. Como las semillas resultantes son libres de regalías, las compañías de semilla locales pueden ofrecerlas a pequeños productores a precios asequibles.
Actualmente, los materiales WEMA están siendo evaluados en pruebas de campo confinadas de 2,5 has en Chokwe, provincia de Gaza, Mozambique. Variedades de maíz convencionales y materiales transgénicos WEMA, fueron comparados en ensayos a campo confinados el año pasado y los resultados superaron las expectativas. No se aplicaron pesticidas en ningún momento del ciclo de cultivo en ninguna de los materiales y, frente a una combinación de presión de barrenador del tallo y gusano cogollero, los materiales transgénicos WEMA rindieron un 30% más que los convencionales. Los materiales WEMA mostraron resistencia a ambos insectos.
Los resultados son importantes porque el maíz es un alimento básico en África, consumido por más de 300 millones de personas, y el barrenador es una plaga importante que destruye el cultivo, ocasionando pérdidas de rendimiento de hasta 40% en Mozambique. El gusano cogollero, que arribó al continente africano en 2016, se está demostrando igualmente destructivo en varios países.
El barrenador del tallo y el gusano cogollero son plagas especialmente destructivas porque no responden fácilmente a aplicaciones de pesticidas y se reproducen muy rápido. Actualmente, los productores tratan de controlar estas plagas mediante el uso de insecticidas, gastan mucho dinero en pesticidas, y temen que usar tantos productos pueda poner en peligro su salud. Según un reporte sobre el impacto potencial del gusano cogollero en África del Centro Internacional de Agricultura y Biociencias (CABI) del Reino Unido, en 2017, en Mozambique el gusano cogollero causó pérdidas de al menos 282.000 toneladas de maíz representando un costo de us$83,8.
Complementando los problemas de los insectos plaga están los problemas climáticos. La sequía es un gran reto que tienen que enfrentar los productores repetidamente. El cambio climático ha ocasionado pérdidas de cultivos por falta de lluvia y mucho calor, llevando a productores de Mozambique a situaciones de deuda.
En 2016, Sudáfrica fue el primer país del proyecto en comercializar maíz Bt para el uso por pequeños productores. Mozambique espera liberar el maíz transgénico WEMA como el primer organismo genéticamente modificado del país. Los científicos están entusiasmados de que el maíz Bt WEMA también esté mostrando resistencia, aunque parcial, al gusano cogollero, que se ha expandido a casi 30 países africanos, destruyendo maíz y otros cultivos. Un maíz que no necesite tantas aplicaciones de insecticidas, ayudará mucho a los productores en términos de rendimiento.
En Mozambique, la regulación para transgénicos está establecida y conduce al desarrollo de tecnología GMO. Tanto investigadores como productores, esperan un proceso sin sobresaltos que eventualmente permitirá que los materiales transgénicos WEMA salgan al mercado y lleguen a los productores. Los productores en las vecindades ya visitaron los campos donde se está probando el maíz WEMA, están entusiasmados con lo que vieron y esperan ansiosos poder usar la semilla.
Los materiales transgénicos WEMA serán muy importantes porque, incluso si se tiene un sistema de riego, siempre se puede ahorrar agua. La combinación de protección frente a insectos y mayor eficiencia en el uso del agua de maíz pueden ser claves en los esfuerzos de asegurar la provisión de alimentos para África.
